Atras quedo el concreto
10 mayo, 2017Tras adquirir recientemente una planta en Cartagena –que era de la firma Gyptec y que se enfoca en la producción de placas de yeso y perfiles de construcción– y las firmas Hanatec y Panaltec, la alemana Knauf se perfila con una capacidad instalada suficiente para atender el 87 por ciento de la demanda interna colombiana.
La multinacional germana está presente en 70 países y tiene 220 fábricas, y en el 2014 facturó 7.000 millones de dólares.
El gerente de Knauf Colombia, Miguel Fernández Rangel, dijo que están colocando a punto las tres plantas que adquirieron con el fin de atender la demanda local e internacional.
Luego de consolidarse en Europa y Asia, sus directivos vieron la necesidad de llegar a zonas con mayores perspectivas de crecimiento.
En el caso de Latinoamérica solo tenían presencia en dos países: Argentina y Brasil; pero Colombia resultaba una buena opción no solo por lo promisorio de su mercado interno, sino porque su posición geográfica la hacía inmejorable con el fin de llegar a la zona andina, Centroamérica y el Caribe.
De acuerdo con el directivo, el mercado potencial en el país son 30 millones de metros cuadrados de paneles de yeso o ‘drywall’ y 40 millones en el resto del área de influencia.
Con Gyptec (ubicada en Cartagena) y Panaltec (Barranquilla), dice que pueden producir 26 millones de metros cuadrados al año, de los cuales el 30 por ciento (7,8 millones de metros) tiene como destino la exportación.
Sin embargo, según agrega, pueden ampliar su capacidad si la demanda lo requiere. Esto significa que Knauf produce 18,2 millones de metros cuadrados para el mercado interno. “El que las adquisiciones hayan sido cerca de puertos no es solo por la vocación exportadora, sino porque el yeso, su materia prima, es importado de España, ya que dentro del territorio nacional existen pocos yacimientos y su explotación es costosa”, agregó Miguel Fernández, jefe de Knauf Colombia.
Las empresas adquiridas por la multinacional facturan anualmente unos 80.000 millones de pesos, que se pretenden duplicar en dos o tres años.
En Barranquilla, invierten dos millones de dólares para mejorar los procesos industriales. Luego, posiblemente harán inversiones para producir otros perfiles, masillas y referencias diversas que hoy día fabrican en Alemania, Bélgica y Argentina.